Así se puso de manifiesto en un coloquio celebrado en la sede madrileña de la Universidad de Navarra
Parece una obviedad resaltar que los jóvenes serán los principales lectores de los medios en un futuro cercano. No hace falta plantear un estudio o una encuesta para llegar a la conclusión de que las personas que en la actualidad rondan los 25 años serán los futuros consumidores de los medios, principalmente los digitales. A pesar de lo previsible del pronóstico, numerosos encuentros y reuniones de expertos siguen insistiendo en esa idea.
Tal es el caso de un coloquio celebrado en la sede madrileña de la Universidad de Navarra, en el que participaron expertos en comunicación y posicionamiento en medios de comunicación digitales, que estuvo presidido por la decana de la Facultad de Comunicación del mencionado centro académico, Mónica Herrero.
Durante la reunión, enmarcada en el 29 Congreso Internacional de Comunicación y en el 7º Encuentro Anual de la International Media Management Academic Association (IMMAA), se puso de manifiesto que son los jóvenes acostumbrados a las nuevas tecnologías los que constituyen una audiencia potencial susceptible de consumir productos informativos y pagar por el valor añadido que representan.
Herrero manifestó que el problema al que se enfrentan las industrias de comunicación es que se encuentran ante una inercia de la gratuidad entre los consumidores, lo que dificulta crear modelos a caballo entre la gratuidad y el pago. En su opinión, hay que tener en cuenta estas dos propuestas para afianzar un producto que se sustente económicamente, sin perder de vista el valor que crean los periodistas con su trabajo.
Una de las soluciones propuestas en el encuentro fue mirar hacia el mercado latinoamericano y corregir la forma de escribir para hacerlo en un español menos local puede ayudar a afianzar a nuestros lectores al otro lado del océano.
Otra de las cuestiones ampliamente debatidas se refirió al hecho de que cualquier profesional no puede perder de vista la ética y que los medios se han convertido en una alternativa para el arbitraje de la sociedad.
La libertad de prensa ocupó también un amplio espacio de debate por ser un referente fundamental para las sociedades libres y desarrolladas. Las compañías que mantienen estos valores pueden estar seguras de confiar y afianzar sus modelos de negocio, según los expertos.